El Ángel
Gabriel, uno de los seres celestiales al servicio del Demiurgo Jehová-Yahweh,
es parte de una gran conspiración celestial que se remonta a miles de años en
la antigüedad y que lo hace partícipe de la creación de las tres religiones más
influyentes en la historia de la humanidad.
El Judaísmo, el Cristianismo y el Islam. Todas estas tres religiones se contradicen unas a otras, a pesar de que todas adoran al mismo dios.
Un dios bárbaro y sanguinario, un dios injusto y vengativo, obsesionado con la veneración ritual. Tres religiones diferentes que adoran al mismo dios, tres religiones diferentes con el mismo conspirador detrás, tres religiones diferentes, pero una sola única y ancestral intención detrás, el caos, la guerra y la destrucción.
El Judaísmo, el Cristianismo y el Islam. Todas estas tres religiones se contradicen unas a otras, a pesar de que todas adoran al mismo dios.
Un dios bárbaro y sanguinario, un dios injusto y vengativo, obsesionado con la veneración ritual. Tres religiones diferentes que adoran al mismo dios, tres religiones diferentes con el mismo conspirador detrás, tres religiones diferentes, pero una sola única y ancestral intención detrás, el caos, la guerra y la destrucción.
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